
El Festival de la Canción de Eurovisión no es solo una celebración musical: también es un imán para las grandes marcas. Durante décadas, patrocinadores globales han aprovechado la enorme audiencia del evento para ampliar su alcance, contar historias audaces y conectar con las tendencias culturales. De la moda a la tecnología, estas marcas no solo patrocinan—actúan. Su presencia se vuelve cada año más creativa, inmersiva e influyente.
Colaboraciones destacadas de marcas en Eurovisión:
- Moroccanoil: Socio oficial de cuidado capilar desde 2020
- Visa: Promueve pagos digitales y zonas para fans
- TikTok: Socio exclusivo de contenidos entre bastidores
- MAC Cosmetics: Estilismo de artistas y delegaciones
- Booking.com: Viajes temáticos inspirados en Eurovisión
El poder de marca detrás del telón
Con más de 160 millones de espectadores anuales, Eurovisión ofrece una de las plataformas mediáticas más valiosas del mundo. Marcas como Pepsi, Visa y Moroccanoil han aprovechado esta exposición para lanzar campañas que van mucho más allá de la publicidad tradicional. Moroccanoil, por ejemplo, se convirtió en socio oficial en 2020 y desde entonces organiza lounges de peinado, activaciones con influencers y tutoriales exclusivos relacionados con el festival.
Visa ha utilizado su colaboración para destacar el uso de pagos digitales seguros en las ciudades anfitrionas, patrocinando zonas de fans e integrando pagos móviles durante las galas en vivo. Estas acciones permiten una interacción directa entre las marcas y el público, no solo a través de las pantallas, sino con experiencias físicas e interactivas memorables.
Estrellas y alcance global
El patrocinio también abre la puerta a colaboraciones con los propios artistas. H&M ha vestido a participantes en diversas ediciones, y MAC Cosmetics ha ofrecido sus equipos de maquillaje en los eventos de prensa y delegaciones. Estas alianzas aportan valor cultural a las marcas, fusionando estilo, performance e identidad.
Otras compañías han optado por la innovación digital. En 2023, TikTok se convirtió en socio oficial de entretenimiento, ofreciendo contenidos exclusivos detrás del escenario y desafíos virales que generaron millones de visualizaciones. Esta sinergia entre plataformas y artistas mantiene el festival fresco y atractivo para el público más joven.
El patrocinio también permite a las marcas alinearse con los valores de Eurovisión: diversidad, inclusión y unidad. Coca-Cola, por ejemplo, lanzó en 2022 su campaña “Love is Love” con envases arcoíris y cortometrajes centrados en artistas queer europeos. Estas campañas no solo reflejan valores corporativos, sino que conectan profundamente con la fiel y diversa audiencia del festival.
Con el tiempo, el rol de los patrocinadores ha evolucionado más allá del apoyo económico. Hoy en día, moldean experiencias para los fans, impulsan la conversación en redes sociales y dejan huella en la memoria colectiva del certamen. El escenario de Eurovisión es un lienzo para marcas valientes, y ellas, a su vez, multiplican su magia.